sábado, diciembre 30, 2006

Bendición del Niño

Una gota de su nombre, bastaba.
Para dibujar las sonrisas en abuelos rostros
en la casa pintada
de estrellas
y paja.

Como una rama de su vida , llegaba.
En mención de lenguas consagaradas
con luz que apenas
toca el agua
y bendita.

De pronto el niño, atrae el beso
ahora rodeado de almas vestidas sexuales
rodeado de buenas manos
y gustos pares

Acaso el silencio basta
acaso la vida que no llega
sólo el beso ,nos dice que se va
mas el cura dice adiós a sus buenas manos.

Santa Eulalia 21/12/06

//Es un intento watanabesco, uno.

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